Hoy te traemos una dieta que está generando un gran interés en todo el mundo, especialmente en Internet, además de levantar cierta polémica por considerarse no del todo sana: la dieta de los colores. Una dieta que en líneas generales se basa en incluir en nuestra dieta alimentos de los cinco colores básicos, esto es, de color azul o morado, rojo, verde, blanco y amarillo. Una dieta que, además de ser una forma de bajar peso, trata de ser didáctica y conseguir que aprendamos a comer de forma sana recurriendo a los estímulos visuales.

Y es que, según los estudios, tendemos a sentirnos más atraídos por aquellos platos llenos de color, esto es, comemos con los ojos. La dieta de los colores aprovecha esta tendencia para llevarnos a llenar nuestros platos con los alimentos que tienen más variedad de color y que además son los más sanos: las frutas y las verduras. Así que, toma nota y dí sí a la dieta de los colores, porque comer con los ojos también es saludable.

¿En qué consiste la dieta de los colores?

Aunque pueda sonar extraño, no tenemos más que hacer la prueba del buffet libre y comprobar como nuestra primera tendencia es ir hacia aquellos platos con más colorido, especialmente la zona de frutas y ensaladas. Si bien, la gula suele poder con nuestro primer impulso y solemos terminar en el área de postres, pizzas y otras comidas también plenas de color y, cómo no, de calorías. Esta dieta de los colores pretende aprovechar esa activación de los sentidos, especialmente del olfato y la vista, para guiarnos hacia la zona sana y hacer que consumamos todos los días verduras, frutas y hortalizas de cinco colores.

Esta práctica, convertida en hábito con las semanas, no sólo nos aportará nutrientes, minerales, fibras y vitaminas, sino que también nos ayudará a perder peso o a mantenerse.

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Alimentos y colores en la dieta de los colores

Los cinco colores que se incluyen en la dieta son el azul o el morado, el rojo, el verde, el blanco o el amarillo. Los alimentos de estos colores tienen una serie de propiedades que ayudarán a proteger nuestro organismo y mejorar nuestra salud. Recuerda que:

1. Las verduras y frutas de color morado o azul aportan altas dosis de antioxidantes, unas moléculas que evitan la oxidación de otras moléculas y que retrasan así el desgaste y envejecimiento prematuro de la piel, tejidos y órganos. Su protección frente a los radicales libres les convierten en ideales para el cuidado de nuestra piel y nuestra salud. En este grupo se encuentran la remolacha, los arándanos, las moras, las ciruelas, las berenjenas y las uvas negras, entre otras.

2. Los alimentos de color rojo son ricos en betacarotenos, siendo también muy recomendables para mantener la salud de nuestra piel, además de ser depurativos y ayudarnos a eliminar todas las toxinas que se acumulan en nuestro organismo. Se destacan los tomates, las fresas, las sandías, las frambuesas, los pimientos, las cerezas y los rábanos.

3. Los alimentos de color blanco, concretamente las frutas y verduras de este color, incrementan las defensas fortaleciendo el sistema inmunológico y optimizar el organismo frente a bacterias y virus. Entre otros se destacan el ajo, el nabo, la coliflor, la cebolla, el puerro y las peras.

4. Los alimentos verdes por su parte ayudan a prevenir el colesterol y las enfermedades cardiovasculares, optimizando la circulación sanguínea. En este grupo se encuentran las espinacas, los kiwis, las acelgas, las lechugas, el brócoli, las alcachofas y los espárragos verdes.

5. Los de alimentos amarillos favorecen el mantenimiento de la buena salud de dientes y huesos, además de mejorar la de nuestra visión y nuestra piel al ser también ricos en betacarotenos. Se destacan las zanahorias, las mandarinas, la calabaza, los melocotones, la piña, el limón, los mangos y las naranjas.