Descargar ebookUno de los alimentos que más se suelen tomar antes o después de los entrenamientos es la fruta. Todos tenemos en la cabeza, desde bien pequeños, las bondades que las frutas nos ofrecen a nuestra alimentación, desde sus nutrientes a la magnífica energía que nos aporta, con unas calorías reducidas. Es cierto que las frutas son uno de los conjuntos de alimentos más saludables y eso las hace perfectas para tomarlas el día de entrenamiento, pero mucha gente duda si hacerlo antes o después del ejercicio físico.
El entrenamiento, ya sea de gran intensidad, de simple musculación o solo para rebajar esos kilos de más que nos sobran, es uno de los pilares básicos para llevar una vida saludable y equilibrada. No tenemos que ver lo de hacer deporte solo como algo que nos ayudará a estar en nuestro peso perfecto, aunque obviamente, al principio tendrá esa función. Los beneficios del ejercicio físico para nuestro cuerpo, incluso cuando estamos más delgados, también son interesantes, desde la movilidad que conseguimos al propio hecho de sentirnos mejor después de realizar actividad física.
Esta actividad, sea del tipo que sea, requiere también una preparación especial por nuestra parte, especialmente relacionada con la alimentación, el segundo pilar de ese binomio indisociable que nos permitirá llevar una vida mucho más saludable. Una dieta equilibrada potenciará incluso los beneficios del ejercicio físico que realicemos, consiguiendo que aprovechemos mejor todo ese tiempo que estamos entrenando. Esto se ve mucho más claro cuando nos recomiendan ciertos tipos de alimento como las frutas en los días que vayamos a entrenar, tanto para el antes como para el después del entrenamiento en sí, para que ese aporte alimenticio también vaya en consecuencia con el ejercicio.
Alimentos recomendados antes y después de cada entrenamiento
Y para ello tendremos en cuenta que, por supuesto, no todos los entrenamientos son iguales en cuando a su duración e intensidad, y que siempre tendremos que adaptarnos un poco a ello, pero a groso modo, podemos sacar ciertas conclusiones. Por ejemplo, para entrenar durante algo más de una hora, sobre todo fuerza, necesitaremos un buen aporte antes del ejercicio, especialmente de carbohidratos, que nos darán la energía necesaria para poder llevarlo a cabo sin quedarnos a medias. Un plato de arroz integral con pollo o pavo puede ser la alternativa perfecta en estos casos, siempre tomado un par de horas antes de entrenar, ya que si nos vamos a hacer ejercicio justo después de comer, el entrenamiento se puede ver afectado por nuestra digestión.
La comida de antes de entrenar es importante porque nos aporta esa energía que necesitaremos para poder poner a nuestro cuerpo al límite de sus capacidades. No obtante, la comida de después del entrenamiento es igualmente importante o incluso más si cabe, para una mayor optimización de ese esfuerzo realizado y para recuperarnos del mismo. Por eso, junto al salmón, a la carne roja o a los cereales integrales, es en esta comida cuando más conviene introducir alguna pieza de fruta, como por ejemplo una piña, un plátano o una naranja, en busca también de recuperar un poco esa glucosa natural que también necesitamos.
Si nos gusta mucho la fruta y también queremos introducirla antes de entrenar, algo que tampoco está prohibido ni mucho menos, sí que tendremos más en cuenta el índice glucémico de la fruta que vayamos a tomar y sobre todo, su cantidad. Podemos comernos un pomelo pequeño, unas pocas cerezas o una manzana no demasiado grande como postre antes del entreno, aunque como recomendamos arriba, mejor optar por tomar después las frutas con alto índice glucémico para recuperarnos del esfuerzo realizado.
