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Estas son las cenas más calóricas que debes evitar

cenas caloricas que debes evitar

Más de una vez habrás oído eso de desayuna como un rey, come como un príncipe y cena como un mendigo. La cena es la última de las cinco comidas diarias, y de nuestra cena depende en parte que podamos dormir y descansar bien durante la noche; de ahí esa necesidad de una cena saludable, ligera y fácil de digerir. La cena perfecta nos aportará entre el 15 y el 25% de las calorías diarias, aunque muchas veces superamos de largo ese porcentaje. Vamos a ver una serie de cenas calóricas a evitar que te permitirán saber si tus hábitos a la hora de cenar son o no correctos.

Bocatas, pizzas, pasta...

Uno de los errores más habituales es pensar aquello de “hoy ceno un bocadillo, que es ligero”. El contenido del bocadillo influye, pero el problema lo encontramos en el pan. No es recomendable comer mucho pan por la noche, ya que no siempre asimilamos bien sus carbohidratos, así que una cena rica en pan no es la mejor opción. Lo mismo pasa con el arroz o la pasta y la pizza, comemos muchas más calorías de las que necesitamos. Lo ideal es comerlos en muy pequeñas cantidades o pasarse a los carbohidratos complejos de los vegetales.

comer pizza no es sano

Carnes rojas

Es verdad que las carnes rojas como la ternera o el buey son una interesante fuente de proteínas, hierro o vitaminas, pero este aporte nutricional va acompañado de una gran cantidad de grasas, por lo que su ingesta ya no es tan recomendable. Si eres de los que prefieren la carne poco hecha debes saber que te puede producir molestias estomacales durante la noche, por lo que tampoco descansarás bien. Por la noche mejor las carnes blancas, la roja la dejamos para la hora de comer.

comer carne roja es bueno o malo

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Los alimentos fritos


Podemos freír de todo, desde las empanadillas hasta el pescado o incluso el plátano, pero este tipo de alimentos deben tener un rol muy limitado en nuestra dieta debido a la gran cantidad de grasas saturadas que contienen. Si a estas grasas saturadas les añadimos la difícil digestión precisamente por culpa de la fritura tenemos otro alimento que, como las carnes rojas, nos puede dar la noche. Todo esto sin olvidar el enorme aporte calórico que supone y que puede provocarnos ciertos problemas cardiovasculares. Los fritos, cuantos menos mejor y a ser posible nunca para cenar.

El helados y el chocolate

Ya sea como postre o como cena única -sí, hay gente que solo cena un bol de helado- ni el helado ni el chocolate deberíamos comerlos por la noche... a no ser que sea un chocolate con más de un 85% de cacao, una pureza casi imposible de encontrar. Además de las grasas y calorías que aporta, el chocolate es estimulante así que dormirás peor. Respecto al helado, también es de esos alimentos que nos aportan muchas más calorías de las que necesitamos, y que no quemaremos por la noche.

Liliya Kandrashevich || Shutterstock

El resopón

Tampoco conviene acostarse nada más cenar, ya que el cuerpo no ha acabado de digerir la cena y el sueño no es tan reparador como debería. Sin embargo, una de las consecuencias de cenar demasiado pronto -también de una cena demasiado ligera- es el resopón. Muchas veces se trata de bollería o dulces, ricos en grasas e hidratos de carbono que nunca utilizaremos, y pobres en nutrientes. Como acabamos de ver, el helado tampoco es una opción.

Una cena ligera no tiene por qué ser escasa, nos tenemos que alimentar lo suficiente para pasar la noche sin problemas hasta desayunar como reyes la mañana siguiente. Además, cenar bien te ayudará a mantener el peso estable. Ahora que conoces estas cenas a evitar está en tus manos optar por unas cenas más sanas y equilibradas.

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