4 motivos por los que es importante masticar bien los alimentos

Hay una gran variedad de actos que realizamos de forma refleja, sin apenas pensar cómo lo hacemos y las consecuencias que puede tener en nuestra salud. Uno de esos actos es la masticación, una de las fases más importantes de la ingesta y digestión de los alimentos. Y es que masticar bien los alimentos es fundamental para tener una buena digestión, aprovechar mejor los nutrientes de los alimentos y que nuestro cuerpo absorba las vitaminas y nutrientes de forma correcta.

Si quieres mejorar tu salud digestiva y sacarle todo el beneficio a los alimentos te recomendamos que mastiques mejor casa uno de los bocados. Y para que tengas claro lo básico que es, en este artículo te ofrecemos los 4 motivos por los que es importante masticar bien los alimentos. ¡Toma nota y aprende a cuidar tu salud!

¿Por qué es importante masticar bien las comidas?

Los estudios han puesto de relieve todas las bondades de masticar bien los alimentos y cómo puede ayudarnos a controlar el apetito y que una dieta para perder peso funcione. Para realizar bien la masticación de lo que comamos será preciso ir contando todas las veces que se mastica cada bocado e ir incrementando poco a poco el número de veces que se realiza este proceso. Además de masticar más veces, también se recomienda aprender a saborear la comida e ir apreciando el aroma, el sabor, al textura y la consistencia de cada alimento.

Piotr Marcinski || Shutterstock


Otro de los consejos a tener en cuenta si queremos que la masticación sea efectiva y ayude a perder peso es concentrarse bien en el proceso, sin estar pendiente de otras distracciones como el ordenador o la televisión, así como otros malos hábitos que te hacen engordar sin darte cuenta. Por último, también se recomienda controlar el tamaño de las porciones de lo que se come, siendo interesante cambiar los platos que usemos por unos de menor tamaño y comer entre cinco y seis veces al día. Entre los motivos por los que es importante masticar bien los alimentos encontramos:

1. Más satisfechos en cada comida

Si procuramos masticar la comida bien podremos controlar el apetito y sentirnos satisfechos durante más tiempo. Un grupo de expertos efectuaron un estudio durante unos días para observar las consecuencias de masticar frutos secos más o menos veces, esto es, entre 10, 25 ó 40 veces cada bocado que se da. Como resultado final se concluyó que cuánto más se masticaban los frutos secos, se reducía el apetito y se incrementaba la sensación de saciedad, siendo también más bajos los niveles de insulina.

2. Se absorben mejor los nutrientes de las vitaminas y los nutrientes

Los investigadores también confirmaron que una buena masticación de los alimentos favorece que se absorban mucho mejor los nutrientes y las vitaminas. Asimismo, otros estudios han demostrado que cuánto más se mastica y mejor se absorben los nutrientes, menos grasa se queda en el organismo. Así, un exceso de grasa es indicio de que los alimentos no se asimilan bien.

3. Nos ayuda a controlar el peso

Si tenemos intención de ponernos a dieta también hemos de tener en cuenta que masticar bien los alimentos será una ayuda más para conseguir reducir peso al sentirse más saciados y comer menos cantidad de comida. Así, y según los estudios científicos, la cantidad de veces que se mastica está en relación directa con la cantidad de alimentos que se ingiere. Si queremos favorecer la pérdida de peso, debemos incrementar el número de masticaciones.

4. Las digestiones serán mejores

Los investigadores también han demostrado que otro de los grandes beneficios y motivos para masticar bien los alimentos es una optimización de las digestiones. Al masticar más veces y durante más tiempo, la saliva descompone mejor lo que comemos al producirse una mayor cantidad poniéndose también en funcionamiento el resto de órganos implicados en este proceso. Al realizarse una masticación más sistemática y prolongada se activa el funcionamiento de órganos como el estómago, el páncreas o el intestino delgado, absorbiéndose mejor las grasas, los aminoácidos y el almidón.

  • ¿Te ha servido de ayuda?
  • No