Desde el tipo de local, hasta la compañía, la música, la ubicación del asiento o la carta...Todos estos, y muchos otros factores nos pueden influir cuando salimos a comer fuera. Descubre 5 trucos para comer sano en un restaurante, a continuación.

¿Cómo comer sano cuando vas a un restaurante?

Si eres de los que piensa que comer fuera de casa no es compatible con tomar comida saludable, puede que te equivoques. Y aunque bien es cierto que salir a comer fuera suele estar relacionado con unos malos hábitos de alimentación, esta teoría se puede revertir, siempre y cuando sepas poner de tu parte.

Y es que, aunque un estudio de la Universidad de Cambridge confirma que el 90% de los platos principales que se sirven en los restaurante tienen un exceso de sal, de calorías y de grasas saturadas, cuando salimos a comer fuera podemos conseguir comer sano y equilibrado si nos aplicamos algunos trucos a partir de ahora:

1. Mejor los restaurantes de ambiente relajado

Si te paras a pensar, los restaurantes de comida rápida y menos saludable suelen contar con potentes focos de luz y música rápida o estridente como parte de su decoración. Por ello, el ambiente del restaurante al que vamos puede incitarnos a comer mejor o peor.

De hecho, un estudio de la Universidad de Illinois reconoce que al cambiar un restaurante con música alta y luces potentes, por un restaurante con luces bajas y música algo más tranquila, podemos llegar a comer hasta un 18% menos y, sobre todo, a comer más despacio.

2. Las compañías también influyen

Otro de los aspectos clave para conseguir comer bien cuando salimos fuera de casa es la compañía con la que acudimos al restaurante. De hecho, lo más habitual es que cuando comemos con amigos cambiemos nuestras preferencias alimentarias.

Por ello, cuando acudimos a comer con amigos que suelen pedir una ensalada, es probable que nos animemos a pedir lo mismo. Pero si quienes nos acompañan piden, por ejemplo, una comida más calórica, es probable que nos dejemos llevar por este deseo de nuestros acompañantes.

3. Mira bien dónde te sientas

Una vez que llegas al restaurante, si deseas comer sano, deberías tener también en cuenta qué sitio vas a escoger. Y es que, según una investigación realizada por el director del Laboratorio de Alimentos de la Universidad de Cornell, las personas que se sientan cerca de las ventanas pueden llegar a pedir hasta un 80%  más de verduras que los que se sientan en el interior.

Según este investigador, esta tendencia se debe a que al sentarnos cerca de las ventanas, estamos públicamente más expuestos y, por lo tanto, sentimos cierta presión a comer mejor.

4. Cuenta kilómetros en vez de calorías

Es lo que manifiesta un estudio de investigación reciente que apunta que la gente que acude a comer a un restaurante, reacciona mejor cuando en la carta y junto a cada plato, se señala cuántos kilómetros necesitaría una persona correr o caminar para quemar las calorías de ese plato.

5. Fruta o ensaladas como primer plato en los buffets

Cuando acudimos a comer a un restaurante tipo buffet, lo más probable es que nos dejemos seducir por los platos más calóricos al echar el primer vistazo. Por ello, lo más sensato si vamos a este tipo de establecimientos es siempre escoger primero la fruta y comenzar a comerla antes que cualquier otro plato. Y si es en la cena, lo mejor es comenzar por una ensalada.

Y es que, al terminar de comer la fruta o la ensalada, te sentirás mas saciado y renunciarás a tomar alimentos menos saludables o muchos de los platos que te tomarías cuando te sientes realmente hambriento.