Aunque hay mucha leyenda al respecto, es cierto que el aceite de palma no es saludable, así que lo evitaremos en la medida de lo posible. Es el aceite más consumido del mundo, pero la mitad de sus grasas son saturadas, de ahí que su consumo favorezca la aparición de problemas cardiovasculares. Aumenta el colesterol malo y reduce el bueno, y aunque las etiquetas de los alimentos señalan si se ha utilizado este aceite es importante conocer los alimentos ricos en aceite de palma para evitarlos.

1. Bollería, tartas, galletas, pasteles

La bollería industrial suele aparecer entre los alimentos menos saludables, y una de las razones es el aceite de palma. Hasta hace relativamente poco se utilizaban grasas hidrogenadas y mantequilla en su producción, pero la prohibición del uso de grasas hidrogenadas por su peligrosidad dio paso al aceite de palma. No vamos a decir que el remedio sea peor que la enfermedad, pero el aceite de palma y sus grasas saturadas eran la alternativa más económica a las grasas hidrogenadas, lo que no significa que fuesen la más saludable.

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2. Productos untables

Una de las propiedades de las grasas saludables es que nos facilita el untar los alimentos, de ahí que muchas margarinas y mantequillas, cremas de cacao, quesos o mayonesas. El problema llega cuando al refinar el aceite supera los 200ºC, y según los productores eliminar el aceite de estos productos untables reduciría su calidad. Es el argumento de Ferrero, propietaria de la Nutella, que para paliar estos efectos refina el aceite a temperaturas y presiones más bajas para reducir los peligros del aceite de palma.

3. Coberturas y cremas

Otra de las propiedades del aceite de palma es que se funde mejor que el chocolate, lo que permite a las grandes marcas del mundo de la alimentación mantener y almacenar mejor las coberturas y las cremas de muchos alimentos. También se mantiene sólido a mayor temperatura que el chocolate, de ahí que en los dulces y la bollería se utilice para dar consistencia a estos alimentos.

4. Comida precocinada

También es muy habitual que el aceite de palma esté presente en los alimentos precocinados, como las pizzas, las patatas fritas o los alimentos empanados. Algunos pescados congelados que ya vienen rebozados, los canelones, tortellinis, flautas... La razón es muy simple: el aceite de palma enrancia menos que otros aceites vegetales, lo que permite estirar un poco más la fecha de caducidad de estos alimentos precocinados. Todo ello sin olvidar que es mucho más económico que el resto de aceites de origen vegetal.

5. Aperitivos y chips salados

Antes decíamos que el aceite de palma soporta las altas temperaturas mucho mejor que alimentos como el chocolate, y eso hace que la industria de los alimentos lo utilice a la hora de preparar las típicas galletitas saladas, las patatas fritas o los snacks de maíz porque aguantan más frituras que otras grasas. Entre estos snacks ricos en aceite de palma se esconden alimentos que en apariencia son saludables, como el muesli, los combinados de frutos secos, las barritas energéticas, los chips de verduras o las tortas de arroz, uno de los snacks preferidos de quienes están a dieta.

¿Cómo podemos evitar estos alimentos?

Como ves, evitar el aceite de palma es una misión casi imposible. Está presente en un montón de alimentos que forman parte de nuestra lista de la compra habitual así que tendremos que mirar la etiqueta para asegurarnos de que compramos alimentos libres de aceite de palma. En cualquier caso, los efectos dañinos suelen llegar después de un consumo abusivo y prolongado en el tiempo; y si no hay más remedio que consumirlos, los aceites de palma sostenibles reducen la huella ambiental.