Cuida tu piel en verano con productos naturales: tips y consejos

Aprenda a cuida la piel en verano con productos naturales

Los rayos ultravioleta, la sal del mar, el cloro de las piscinas o las altas temperaturas son algunos de los factores de externos que ponen en riesgo nuestra piel en verano. Con el objetivo de llegar al otoño con una piel saludable, es importante poner en marcha una serie de cuidados básicos que nos ayuden a protegerla. ¿Cómo debemos cuidarla? Aportando un extra de hidratación. Para ello, puedes optar por cosméticos naturales y ecológicos como los que ofrece Weleda. De este modo, podrás nutrir tu piel con los ingredientes más naturales.

3 tips esenciales para cuidar tu piel en verano

Con los baños en la playa y en la piscina, lo que más nos apetece en verano es mantener una piel sana, hidratada y libre de brillos. Sin embargo, con la exposición al sol y a las altas temperaturas es necesario llevar a cabo una rutina diaria para que la piel esté cuidada y nutrida. Te explicamos algunos tips que puedes aplicar:

Mantener la piel limpia con productos naturales

En este momento, la higiene se convierte en una de las mejores herramientas para combatir la sequedad que dejan las altas temperaturas y otros factores externos. La mejor forma de limpiar la piel en cualquier momento del año es mediante el uso de productos naturales y ecológicos, como los packs de cuidado 100% natural de Weleda. Todos ellos contienen desde cremas, leches, geles, y aceites corporales hasta otros productos ideales para el cuidado natural de la piel.

En estos meses, nuestra piel y rostro se encuentran más expuestos a la deshidratación que durante el resto del año. Por tanto, a la hora de elegir los productos esenciales para la piel, es preferible escoger cremas y geles con una acción hidratante. Lo más indicado es optar por las cremas, las espumas limpiadoras, las emulsiones y lociones hidratantes, las mascarillas y las aguas micelares.

¿Cuándo debemos realizar esta rutina? Lo ideal es preparar la piel por la mañana nada más levantarnos y después por la noche, justo antes de irnos a dormir. Así, con estos sencillos pasos para el cuidado de la piel, podrás repararla y regenerarla de los daños causados por el sol y las altas temperaturas a lo largo del día.


Protegerse adecuadamente del sol

Por otro lado, la protección de los rayos ultravioleta debe ser una de las prioridades en la rutina de cuidado de la piel. En este sentido, los expertos recomiendan utilizar una crema de protección solar alta, especialmente cuando la exposición al sol va a ser muy prolongada o en zonas de alta radiación solar. En caso de irse a la montaña o a la costa, se debe elegir una pantalla de protección total (FPS +50).

Existe una amplia gama de protectores solares en el mercado, desde cremas o sprays con texturas más fluidas hasta cremas que aportan color a la piel. A su vez, también puedes encontrar geles, maquillajes compactos con filtro de protección solar o espumas de alta resistencia al agua y arena.

Hidratarse

En ocasiones, la piel nos lanza algunas señales para alertarnos de que la sequedad se va apoderando poco a poco de nuestra dermis. Y es que la sal, el cloro y, sobre todo la acción de los rayos UVA, restan mucha hidratación a la piel.

Por ello, la ingesta de líquidos, como agua y té, es una de las rutinas básicas que debemos poner en práctica durante los meses de verano. Al mismo tiempo, resulta esencial tener una correcta hidratación de la piel. La cara, el cuello y el escote son las zonas más expuestas a los efectos de los rayos ultravioleta en verano, por lo que debemos incidir en ellas y nutrirlas por la mañana y por la noche.

Recuerda estos tres pasos: limpieza, protección solar y mucha hidratación. De este modo, tu piel estará sana y cuidada incluso en los calurosos meses de verano.

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