¿Qué alimentos nos ayudan a tener la próstata sana? ¿Existe algún tipo de alimentación que pueda prevenir problemas como la hiperplasia de próstata o el cáncer? Y respecto al tratamiento, ¿qué alimento puede ayudarnos a mejorar los síntomas? Estas preguntas forman parte de la cultura popular y son muchos los pacientes que las formulan a los médicos de cabecera y urólogos.

Existe una gran cantidad de compuestos alimenticios y nutracéuticos que provienen de la medicina tradicional y que parecen tener una relación con la prevención y la mejoría de los problemas de próstata.

¿Existe algún alimento o dieta que nos ayude a mantener la próstata sana?

Desafortunadamente, no, pero algunas dietas parecen estar relacionadas con menor riesgo de Hiperplasia Benigna de Próstata y otros problemas prostáticos. Estas son la dieta mediterránea y la dieta vegetariana, que son las dos únicas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud.

Esta protección se debe a la disminución de la inflamación y la oxidación propias del consumo de alimentos procesados, especialmente grasas y azúcares.

¿Existe algún alimento malo para la próstata?

Esta sería la otra cara de la moneda… ¿hay algo que debamos evitar? De la misma manera, no existen alimentos malos específicamente para los problemas prostáticos, aunque una dieta inadecuada causará problemas a la larga.

Muchos estudios relacionan la obesidad producida por los alimentos procesados con una mayor probabilidad de problemas de próstata, mayor gravedad de los mismos, e incluso con el cáncer de próstata.

Es importante tener en cuenta que, en el corto plazo, algunos alimentos como las bebidas alcohólicas, las bebidas carbonatadas (con burbujas) o edulcoradas, el café o las bebidas con cafeína, las bebidas energéticas y los alimentos muy picantes empeoran la micción. Esto no significa que estos alimentos afecten a la próstata, pero pueden ocasionar síntomas parecidos a los de la hiperplasia de próstata de manera transitoria.

Por tanto, desde la consulta de urología se aconseja mantener una alimentación sana y equilibrada, que va a disminuir el riesgo de problemas de próstata. En hombres que ya presenten síntomas, es recomendable limitar la ingesta de sustancias como las bebidas energéticas, edulcoradas o con gas, el alcohol y el café.