Las barritas energéticas se han convertido en el aliado perfecto, tanto para las personas que cuidan su línea y buscan perder algo de peso, como para las que se someten a largas sesiones de ejercicio físico con frecuencia. Se trata de un buen alimento energético a valorar para su introducción.
Este suplemento alimenticio tiene muchas ventajas como, por ejemplo, que son fáciles y cómodas de llevar a todas partes, que tienen un agradable sabor, y que suelen proporcionar un gran efecto saciante tras su ingesta.
Sin embargo, está comprobado que el uso de barritas energéticas durante periodos de tiempo muy prolongados, o como barritas sustitutivas de las comidas principales del día, puede tener efectos negativos para nuestra salud.
¿Podemos comer muchas barritas energéticas?
En este sentido, numerosos estudios científicos han puesto en entredicho la eficacia de las barritas energéticas ya que, en muchas ocasiones, este tipo de suplemento tan sólo contiene altas dosis de azúcar y cafeína.
Además, por lo general, los ingredientes que contienen estas barritas (especialmente las proteínas) suelen ser altamente procesados, por lo que un consumo abusivo podría acabar acarreando problemas de salud.
Entre los ingredientes principales que suelen contener estas barritas encontramos, por ejemplo, la proteína de leche, la glucosa, el jarabe de maíz, incluso, muchos conservantes y estabilizantes, que sirven para proporcionarles ese agradable sabor que las caracteriza.
Otro de los aspectos a tener en cuenta, sobre todo por las personas que buscan en las barritas energéticas un alimento 'light' que puedan incluir en su alimentación es, que este tipo de suplementos, suelen contener entre 300 y 400 calorías.
Además, la fructosa y el jarabe de maíz que contienen, elevan de forma considerable la cantidad de azúcar y la cantidad de grasa que le proporcionamos a nuestro organismo. Por lo que un consumo elevado podría desestabilizar los niveles de glucosa en sangre o podría elevar el colesterol.
El mejor momento para una barrita energética
A la hora de comprar barritas energéticas podemos comprobar que existen diferentes gamas, según el efecto que busquemos conseguir. En este sentido, las más comunes suelen ser las barritas energéticas ricas en proteínas, que suelen contener alrededor de 25 gramos de proteína, por cada 80 gramos que suele pesar la barrita.
Este tipo de barritas ricas en proteínas son ideales para personas que realizan ejercicio físico de forma frecuente, y se recomienda tomarlas antes o después de cada entrenamiento. Además de las proteínas, estas barritas contienen carbohidratos de absorción rápida, que confieren energía al organismo durante toda la sesión de ejercicio físico.
Otro tipo de barritas energéticas que se pueden encontrar con mucha frecuencia, son las barritas ricas en cereales. Este tipo de suplemento contiene, además de fibra, un elevado índice de carbohidratos por lo que la hora del día más recomendable para consumirlas es el desayuno. Algunas suelen estar enriquecidas con chocolate, aunque las personas que quieren perder peso es más recomendable que consuman las que están elaboradas con frutas y cereales.
También podemos encontrar barritas energéticas sustitutivas de comidas. Suelen ser barritas algo más contundentes que las de cereales o las de proteínas, ya que su peso puede superar los 150 gramos. La finalidad de estas barritas es tomarlas para sustituir una de las comidas principales del día, por ello, suelen estar enriquecidas con todo tipo de nutrientes: proteínas, carbohidratos, azúcares y grasas.
Finalmente, podemos encontrar también barritas energéticas enriquecidas con carbohidratos. Este tipo de suplemento suele ser recomendable tomarlo antes de hacer ejercicio físico, ya que aporta una gran cantidad de energía de asimilación rápida. Los carbohidratos que contienen este tipo de barritas se transforman en glucógeno para ayudar a nuestro organismo a prevenir sobrecargas musculares durante el entrenamiento.