“Somos lo que comemos”. Esta frase es la piedra angular de la comida macrobiótica. Esta alimentación, basada en cereales, frutas, verduras y granos está ganando cada día más seguidores, todos aquellos que creen en la mente sana en un cuerpo también sano.
Aunque se considera que los alimentos macrobióticos forman un régimen muy saludable, para muchas personas es una dieta peligrosa, entre otras razones porque el bajo aporte de proteínas puede originar una desnutrición. En cualquier caso, lo más apropiado siempre es consultar con un profesional y realizar los estudios médicos pertinentes.
Los orígenes de la comida macrobiótica
La dieta macrobiótica se basa en la medicina china y el budismo zen, para los cuales la salud depende del equilibrio de dos principios de la naturaleza: el yin (femenino, oscuro y frío) y el yang (masculino, luminoso y caliente). Este equilibrio se consigue con una alimentación adecuada, la serenidad espiritual y la tolerancia.
Según esta teoría, a cada alimento se le considera como “yin” o “yang”, o una combinación de ambas cosas. La dieta ideal sería aquella que hace posible que estas dos fuerzas se equilibren en el interior del cuerpo.
Alimentos permitidos y prohibidos en la dieta macrobiótica
La alimentación macrobiótica es una forma de comida vegetariana, con la que evitar diferentes enfermedades. Los alimentos se integran en los diferentes componentes de las fuerzas de la naturaleza.
- Entre los alimentos prohibidos están: la carne, huevos, lácteos y otros derivados, el pan, cereales refinados, el azúcar y el café. En el caso del tomate, el pimiento y la patata, ingeridos en exceso dejan de ser sanos.
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- Como alimentos permitidos estarían: pescado, marisco, semillas y granos integrales, legumbres, frutos secos, soja fermentada, frutas y verduras de temporada, té e infusiones.
- Alimentos específicos de la dieta macrobiotica: en la alimentación macrobiótica se da esta denominación, alimentos específicos, a algunos como las algas, productos derivados de la soja, tés verdes, el miso, etc.
Ejemplos de recetas cien por cien macrobiótico
Hay muchos ejemplos, los que pueden combinarse con los alimentos permitidos, cocinados en su propio jugo y sin grasa. Con este tipo de menús, en la dieta macrobiótica se asegura que se puede combatir cualquier enfermedad con la alimentación.
- Un carpaccio de marisco
- Una tarta de manzana
- Salmón y una infusión o zumo de frutas de temporada, sería un buen ejemplo.
- Una ensalada de verdura de temporada
- Una hamburguesa de soja con pan de cebolla y un jugo de fruta natural.
¿Cómo comer los alimentos de la dieta macrobiótica?
No se trata necesariamente de una dieta para adelgazar. La clave es tratar cada ingrediente y cada preparación mediante técnicas que respeten las propiedades particulares de cada uno de los alimentos.
- Los cereales integrales constituyen el 50% del total de la alimentación diaria: entre ellos, el trigo normal y el sarraceno, el centeno, cebada, avena, mijo, arroz, maíz, y el cuscús.
- El 25% de la alimentación diaria estaría formado por hortalizas y verduras cocidas.
- Una o dos veces al día tomar una taza de sopa de miso o de soja, a la que se añaden vegetales y algas.
- Un 15% de la alimentación diaria está formado por legumbres.
- En lo que respecta a las proteínas de origen animal, se puede tomar pescado blanco dos veces por semana y, en casos excepcionales, carne de pollo y de pavo.
- Los huevos solo los que están fertilizados, tres unidades al mes.
- Las bebidas y los líquidos se tomarán a sorbos, después de las comidas, no durante la comida.
- La fruta mejor tomarla cocida o seca.
