5 formas sencillas de medir cantidades en la cocina

Aprender a cocinar sano

Cuando muchos hablan de que comemos con los ojos antes que con el estómago, se refieren principalmente a que nos llama más la atención un gran plato lleno de comida, quizá demasiada, más de la que necesitemos. De hecho, no hay una medida estándar para definir lo que se sirve en un plato de comida. Cada plato es diferente y cada cual lo llena a su manera, además de que según la persona y su metabolismo, una misma cantidad de comida puede ser mucho o poco.

Si estamos pensando en hacer dieta para perder peso o simplemente buscamos un sistema de comer lo necesario, y nunca de más, debemos tener muy en cuenta la cantidad de comida que ingerimos. Dejando ya atrás esas vacías medidas como “bol” o “plato”, es necesario adaptarnos a lo que realmente necesitamos, según nuestro modo de vida. La importancia de medir bien la cantidad de comida que tomamos es absoluta si queremos mantener la línea o bajar de peso, para evitar así quedarnos cortos o pasarnos en cada ración.

¿Cómo puedes medir cantidades de comida sin peso?

Existen algunas fórmulas muy sencillas y útiles que podemos utilizar para medir cantidades en la cocina, algo que nos beneficiará sobremanera a la hora de hacer algunas recetas, y sobre todo, a controlar nuestro peso.


  • Las frutas como naranjas o manzanas deben ser del tamaño aproximado a nuestro puño, ni más pequeñas ni más grandes.
  • Para saber qué cantidad de ensalada debemos preparar, se suele decir que el tamaño de una ración debe ser igual al de una pelota de béisbol, que viene a pesar algo más grande que una de tenis.
  • Para la carne y el pescado, cuando venga en filetes, estos no deben ser excesivamente grandes. De hecho, la ración recomendada para carnes es que los filetes tenga el tamaño y volumen aproximado de una baraja de cartas. En cuanto al pescado, especialmente si es a la plancha, debe medir aproximadamente como nuestro Smartphone.
  • Nuestro puño también puede ser una buena referencia para la ración de pasta que vayamos a preparar. Un puñado del mismo tamaño que nuestra mano cerrada corresponde aproximadamente a media taza, teniendo en cuenta que luego la pasta se agrande al hervirla.
  • También hay que cuidar las cantidades de sal, azúcar o aceite que ponemos en cada alimento. Nuestro pulgar extendido puede ser una buena referencia para ello.

Estos sencillos trucos nos ayudarán a poder cuantificar la comida sin necesidad de tener utensilios de cocina para medir a nuestro alcance, aunque es obvio que siempre que podamos disponer de ellos, como una báscula o una cuchara medidora, convendría utilizarlos.

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