¿Eres de los que le quitan la piel a la patata antes de cocinarla o de comerla? ¡Error! Aunque no lo creas, los beneficios de la piel de patata para la salud son múltiples. Lo primero que debes saber al respecto es que la piel de patata contiene fibra y nutrientes esenciales para nuestro organismo, especialmente vitamina C, que se mantienen en gran parte aunque la cocinemos. Pero, las propiedades de la cáscara de la patata van más allá de la nutrición, y es que la piel de patata aporta unos beneficios que te sorprenderán en cuanto los descubras.
Por ejemplo, ¿sabías que la piel de patata supone un complemento ideal para el cuidado de la piel y para la prevención de enfermedades cutáneas? Así es, y por si fuera poco, la piel de patata puede emplearse también en el campo de la belleza.
Si quieres saber más sobre los beneficios sorprendentes de la piel de patata, no dudes en seguir leyendo:
1. Mejora la digestión
Siempre y cuando la consumas con moderación y nunca en grandes cantidades, la piel de patata resulta una buena opción para aquellas personas que sufren dificultades para digerir los alimentos más pesados. Aunque presenten una gran cantidad de carbohidratos complejos, las cáscaras de patata carecen de grasas y proteínas que impidan hacer la digestión. Eso sí, asegúrate de que consumes ligeras porciones de piel de patata junto con otras verduras ricas en fibra, ya que podrías padecer acidez estomacal o reflujo.
2. Fortalece el sistema inmunológico
La piel de patata es una fuente importante de vitaminas B, C y calcio, nutrientes imprescindibles para proteger y fortalecer el sistema inmunológico del cuerpo. Si consumes piel de patata con moderación, estarás ayudando a mantener unos niveles de energía correctos y, por tanto, tu rendimiento físico y mental mejorará considerablemente.
3. Previene el estrés
De entre los beneficios de comer la patata con piel se encuentra la prevención de las situaciones de estrés o ansiedad. La piel de este tubérculo proporciona a nuestro cuerpo una cantidad importante de vitamina B6, un elemento que estimula la reparación celular. Con ello, se disminuye el riesgo de que nuestros tejidos se dañen y la presencia de los neurotransmisores que causan el estrés.
Además, la vitamina B6 ayuda en la producción de dopamina y serotonina, dos tipos de hormonas que regulan los estados de ánimo.
4. Es un exfoliante natural
¿Habías oído alguna vez que la piel de patata puede emplearse como un limpiador facial natural? Para ello, corta el tubérculo y un pepino en trozos medianos, fusiónalos bien con ayuda de una licuadora y agrega una cucharadita de bicarbonato de sodio con un poco de agua. A continuación, aplica la mezcla sobre tu cara para eliminar las imperfecciones, como los puntos negros y la suciedad acumulada. En pocos días, lucirás una piel fresca y brillante.
5. Ayuda a eliminar las ojeras
Así es, la piel de la patata te ayudará a eliminar las ojeras de forma natural. Las patatas son un blanqueador natural para nuestra piel y especialmente para la zona inferior de los ojos. Para notar sus beneficios, corta la patata cruda en rodajas y pégalas en los ojos durante 15-20 minutos. Después, lávate la cara con agua tibia y repite el proceso al menos una vez cada día. También puedes probar con un trozo de algodón bañado con jugo de patata.
Asimismo, puedes emplear la piel de patata para favorecer la desaparición de manchas faciales o marcas oscuras en tu cuerpo.
6. Controla el nivel de azúcar en la sangre
Gracias a su alto contenido en fibra y demás nutrientes esenciales, la piel de la pata resulta una gran aliada para controlar y prevenir los niveles de azúcar demasiado elevados. También permite reducir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
7. Reduce el colesterol
Si tu médico te ha confirmado que tu nivel de colesterol ‘malo’ es demasiado alto, tal vez sea momento de aprovechar las ventajas de la piel de patata para reducir su presencia en la sangre. La fibra y los antioxidantes que contiene, como los glicoalcaloides y los polifenoles, producen un efecto muy positivo para eliminar el exceso de grasa que se acumula en las arterias.
8. Previene las enfermedades cardíacas
Este beneficio está estrechamente ligado con el anterior. Al reducir los niveles de colesterol ‘malo’ y aportar una cantidad importante de potasio a nuestro organismo, la piel de patata resulta un alimento ideal para controlar la presión arterial. Así, incorporarla a tu dieta disminuirá las probabilidades de padecer una enfermedad cardíaca, un infarto o un accidente cerebrovascular.
9. Es un remedio eficaz contra el estreñimiento
Sus altos niveles de fibra convierten a la cáscara de la patata en una opción perfecta para mejorar el tránsito intestinal y, con ello, prevenir el estreñimiento. Para conservar esta propiedad y obtener todos sus beneficios, deberás consumir la piel de la patata cocida, al vapor o en infusión.
10. Ayuda a curar las heridas
Y, finalmente, la piel de la patata presenta propiedades antimicrobianas y curativas, lo cual ayuda a curar las heridas. Para ello, hierve las cáscaras y utilízalas como vendaje para las quemaduras. Además, previene la expansión de las bacterias y la aparición de hongos en la piel, así como infecciones cutáneas. Increíble, ¿verdad?
Ahora que ya conoces los beneficios de la piel de patata más sorprendentes, ¿a qué esperas para sacarle partido a las cáscaras de este tubérculo?
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