Acidez, hinchazón abdominal, pesadez, saciedad precoz... Solo son algunos de los problemas estomacales más habituales, muchas veces asociados a los malos hábitos alimenticios y a un ritmo de vida estresante que nos impide comer con la tranquilidad necesaria para que nuestro organismo asimile todos los nutrientes de los alimentos. Hay alimentos que facilitan la digestión y otros que la hacen más pesada, así que vamos a aprovechar para conocer cuáles son los alimentos de fácil digestión y así evitarnos indigestiones que nos compliquen comidas o cenas.
¿Qué alimentos facilitan la digestión?
Las frutas y verduras ocupan un lugar destacado en la lista de alimentos de fácil digestión gracias a sus vitaminas y minerales, pero también a un contenido en fibra que favorece el tránsito intestinal que nos evita la acumulación de gases. Manzanas, peras, plátanos, ciruelas, piñas, soja -y leche de soja-, el apio, las patatas, zanahorias, coles o espinacas son algunos de los mejores ejemplos. Para evitar el reflujo es mejor comer las verduras a temperatura ambiente; y si lo hacemos en forma de puré mejor, utilizaremos menos sal.
Siempre que los comamos con moderación (pues de lo contrario son indigestos) los frutos secos ayudan a una buena digestión debido a su aporte vitamínico. El arroz, en especial el integral, también tiene una importante cantidad de fibra que ayuda a facilitar la digestión y además reduce el colesterol. Lácteos como el yogur o la cuajada aportan su granito de arena, ya que ayudan a reponer la flora intestinal. Mejor elegir un yogur natural, ya que los de sabores tienen más azúcar y endulzantes artificiales.
El pescado azul y la carne blanca también aparecen en la lista de alimentos digestivos. Pescados azules como el salmón, el atún, las sardinas, los arenques o la caballa son ricos en ácidos grasos, y se digieren muy bien. En cuanto a las carnes blancas como el pollo destaca su escasa grasa (a diferencia de las rojas), lo que sin duda facilita muchísimo la digestión. Y pese a las muchas leyendas que existen acerca de los huevos, se pueden incluir sin problemas en nuestra lista de alimentos de fácil digestión -tanto la yema como la clara-, preferentemente hervidos o revueltos.
Cómo cocinar los alimentos para facilitar la digestión
Tan importante es el qué como el cómo, ya que la forma en que preparemos los alimentos tiene un gran papel a la hora de facilitarnos la digestión o torturarnos con una pesada digestión. Si recuperamos el ejemplo del huevo, hemos dicho que mejor comerlo hervido que revuelto, mientras que si lo haces frito el aceite lo hace más difícil de digerir. Lo mismo nos pasa cuando freímos el resto de alimentos, la fritura tiene una importante cantidad de grasa que dificulta el proceso digestivo.
Por eso uno de los consejos para mejorar la digestión es apostar por otras técnicas de cocina como el hervido, el vapor, la plancha o el horno. El contenido graso es mucho menor y eso se nota a la hora de hacer la digestión. En un término medio encontramos las cocciones que forman costra tostada, como el asado, donde los alimentos se doran y el exterior se endurece de forma notable. Aunque también se pueden utilizar, la digestión no será tan fácil como si preparásemos la misma carne a la plancha. En cualquier caso, siempre es mejor que el frito.
Como ves, es tan importante conocer los alimentos que nos facilitan la digestión como la forma de prepararlos ya que el mismo alimento se puede digerir de forma diferente según esté hecho frito o a la plancha. Si además masticamos bien y evitamos bebidas con gas, cafeína o alcohol pronto empezaremos a notar como mejora nuestra digestión y se vuelve mucho más ligera.
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