Estamos acostumbrados a utilizar la harina de trigo, pero seguro que alguna vez has oído hablar o has visto en el supermercado harinas alternativas como la de avena o la de maíz. Hoy nos vamos a fijar en la harina de almendras, una harina sin gluten que podemos utilizar perfectamente en vez de la harina convencional. Se trata de una harina muy sana y nutritiva, y a diferencia de lo que solemos pensar al hablar de harina, no engorda. Además de ser apta para celíacos, también es recomendable para diabéticos y compatible con la paleodieta, así que vamos a descubrir los beneficios de la harina de almendras.

1. Tu corazón te lo agradecerá

No son pocos los beneficios de las almendras para nuestro corazón. Por una parte vemos que aumentan los antioxidantes en el flujo sanguíneo, mejorando la circulación y reduciendo la presión arterial, lo que permite al corazón funcionar mejor y reducir el riesgo de sufrir enfermedades coronarias -reducen hasta en un 50% el riesgo de ataque al corazón-. Por otra parte nos encontramos con que más del 65% de sus grasas son monosaturadas, lo que nos ayuda a mantener a ralla los niveles de colesterol. Así, los vasos sanguíneos se mantienen sanos, disminuyendo las posibilidades de sufrir problemas cardíacos.

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2. Supone un gran aporte energético

Grasas saludables, macronutrientes y micronutrientes son el cóctel perfecto para conseguir un alimento muy energético, y la harina de almendra lo es. Las riboflavinas, el manganeso y el cobre son básicos en la producción de energía ya que aumentan los glóbulos rojos, estimulan a nuestros órganos y ayudan al crecimiento y el desarrollo.

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3. La harina de almendras no engorda

Lo decíamos al principio, mucha gente cree que la harina de almendra engorda y están equivocados. Las grasas de la harina de almendras no están saturadas, por lo que son grasas saludables. De hecho los ácidos grasos como el omega 3 o el omega 6, presentes en esta harina, son indispensables para que nuestro organismo funcione correctamente. Si estás siguiendo una dieta baja en calorías para perder peso puedes añadir un puñado de almendras, ya que varios estudios señalan que es más efectivo consumir así los hidratos de carbono si quieres adelgazar.

Un cuarto de taza de harina de almendras, lo que consumimos habitualmente, nos aporta 138 calorías, el 7% de la ingesta diaria recomendada en una dieta estándar de 2.000 calorías. Son menos de las que nos aporta la harina de trigo, y aunque la de almendras contiene más grasas las de la harina de trigo suelen ser saturadas. También aporta más hierro que la harina tradicional, y su índice glucémico es más bajo lo que nos lleva a nuestro siguiente punto.

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4. La harina de almendras ayuda a regular el azúcar en sangre

Otra de las propiedades de la almendra que se conservan intactas en la harina de almendras es que ayudan a controlar los niveles de insulina y de azúcar en sangre. Ya hemos hablado de su poder antioxidante, por lo que también evitan los daños provocados por la oxidación convirtiéndose así en una alternativa a la harina de trigo a tener muy en cuenta para los diabéticos. Por supuesto también ayuda a prevenir esta enfermedad y a reducir sus efectos en quienes conviven con ella.

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5. Tiene propiedades anticancerígenas

Quizá sea una de sus propiedades más desconocidas, pero las almendras son uno de los mejores alimentos para prevenir el cáncer de colon, y la harina de almendra no es ninguna excepción. Una vez más hay que hablar de los antioxidantes como los fitoesteroles, ya que además de ser beneficiosos para el corazón o para regular los niveles de azúcar combaten a los radicales libres, asociados a varios tipos de cáncer, y evitan la formación de células cancerígenas.