¿Qué efectos tienen las harinas refinadas en nuestra salud?

La sociedad actual ha empeorado sus hábitos alimenticios, provocando así un tipo de alimentación mucho más perjudicial para la salud. El excesivo consumo de alimentos dañinos para la salud como las harinas refinadas o harinas blancas ha provocado que sean muchas las personas a lo largo y ancho del planeta que sufran de sobrepeso y obesidad, entre otras patologías.

Las harinas blancas, además de no aportar al organismo ningún nutriente esencial para su adecuado funcionamiento, aumentan el peso y se encargan de provocar importantes deficiencias a nivel vitamínico que pueden llegar a generar importantes problemas para la salud. Las harinas refinadas son auténticos asesinos silenciosos que van mermando la salud de las personas que los consumen habitualmente.

¿Por qué las harinas refinadas son malas para la salud?

Las harinas refinadas se pueden encontrar en infinidad de productos que se venden en el mercado o supermercado, por ello su consumo suele ser mucho más elevado de lo recomendable.  La ingesta de harinas blancas puede generar numerosos efectos negativos sobre la salud. ¿Quieres conocerlos? ¡Sigue leyendo!

1. Riesgo de sufrir sobrepeso/obesidad

Gran parte de la dieta de muchas personas posee un elevado porcentaje de harinas refinadas blancas. Estas están formadas prácticamente en su totalidad por carbohidratos que, una vez en el organismo, se transforman en glucosa, de la cual se consigue energía. Pero el inconveniente es que al digerirse rápidamente es una corta fuente de energía y provoca un incremento de las fuentes de grasas del organismo.

Monkey Business Images || Shutterstock

Monkey Business Images || Shutterstock

2. Escasez de nutrientes

Otro inconveniente claro de las harinas refinadas es que no cuentan con nutrientes necesarios para el organismo. Al contrario de lo que sucede en la harina integral, en la harina blanca se elimina el germen y endospermo. Ello implica que la fibra, vitamina B y demás nutrientes esenciales quedan totalmente eliminados.

3. Componentes perjudiciales

A las harinas refinadas se les añaden componentes (conservantes y aditivos) para conseguir conservarlas durante más tiempo y potenciar su sabor, componentes que poco tienen de natural y saludables, como las grasas trans o emulsionantes del sabor.

¿Por qué la harina de trigo debe formar parte de una dieta saludable?

4. Riesgo de sufrir alergias y asma

Se ha demostrado que el consumo excesivo de harinas refinadas puede dar lugar a la aparición de alergias, problemas digestivos, así como intolerancia al gluten. Infinidad de personas consumidoras de harinas blancas sufren una importante deficiencia de vitamina B en el organismo. Además, al contar con una enzima conocida como amilasa, puede provocar la aparición de asma.

5. Fatiga o cansancio

Otro de los efectos negativos que provocan las harinas refinadas es el cansancio y la fatiga, ya que la acción de este producto puede llegar a alterar la química del cerebro, generando cansancio, fatiga, e incluso somnolencia y depresión. La persona se sentirá sin fuerzas ni energías.


g-stockstudio || Shutterstock

g-stockstudio || Shutterstock

Principales alimentos compuestos con harinas refinadas

Pero, ¿cuáles son los principales alimentos compuestos por harinas refinadas? Es esencial conocer cuáles son los alimentos compuestos por harinas blancas para poder saber cuáles descartar de la dieta. Toma nota:

  • Pizza
  • Panes
  • Galletas
  • Pastas (macarrones, espaguetis, tortellini, etc.)
  • Croquetas
  • Sándwiches y bocadillos
  • Tortas
  • Pasteles, tartas y postres
  • Tortitas
  • Bollería

Como puedes comprobar en este listado de alimentos, la gran mayoría resultan muy comunes y habituales en la dieta diaria, lo que implica un consumo prácticamente constante y regular de harinas refinadas que poco a poco van acabando con la salud del organismo en todos los sentidos.

Si deseas comenzar a cuidar a tu cuerpo, si deseas comenzar a bajar de peso, recuerda reducir o eliminar las harinas refinadas de tu dieta y sustituirla por productos elaborados con harinas integrales o de otra índole como, por ejemplo, la harina de quinoa o harina de centeno. ¡Comienza a cuidarte!

  • ¿Te ha servido de ayuda?
  • No