A algunas personas esta afirmación podrá sonarles a locura, pero sí, cualquier alimento del mundo, incluso los menos recomendables a priori para aquellos que están haciendo dieta, pueden ser saludables con algunos cambios. Las hamburguesas, con los ingredientes correctos, son el ejemplo perfecto a la hora de convertir algo “prohibido” en una delicia que además nos ayudará a mantener la línea. Pero hay más, mucho más, y hoy queremos centrarnos en los sándwiches, esos grandes olvidados por muchos que pueden suponer un revulsivo exquisito para nuestra dieta.
Porque también podemos preparar un sándwich saludable, si sabemos elegir correctamente los ingredientes que debe llevar. No es que vayamos a restringir demasiado la elección de los mismos, simplemente ofrecemos una alternativa que no solo es deliciosa y exquisita, sino que además es muy sana. Porque de esta manera podremos seguir dándonos el capricho de disfrutar de un buen sándwich sin tener que sentirnos mal por “saltarnos la dieta”. Siguiendo estos simples consejos, el sándwich se convertirá en nuestra mejor opción para almuerzos, cenas saludables o incluso meriendas.
Pan natural e integral
El pan será mejor recién hecho a ser posible, de la panadería local más cercana, para asegurarte de que no tiene conservantes ni ninguna sustancia que no sea puramente natural. El aspecto integral del pan también es importante si queremos hacer un sándwich bajo en calorías, para que no se nos vaya la mano con estas. Además, el pan de molde natural y artesanalmente hecho, con masa fermentada, es mucho más delicioso y sabroso.
Carne de pollo o pavo, fresca y natural
Tal vez encontremos una granja ecológica que crie este tipo de animales y pueda vender su carne de la manera más natural posible, sin aditivos ni conservantes. Buscaremos, de todos modos, huir de esos paquetes de lonchas de pavo o pollo ya envasados (y especialmente de los congelados) a la hora de elegir la carne con la que rellenar nuestro sándwich bajo en grasas. El pollo y el pavo son las mejores opciones en este sentido, por su comedido número de calorías.
Que no falte la verdura
No te quedes solo con unas pequeñas hojas de lechuga o algo de cebolla dulce, añade cualquier tipo de vegetal o verdura que se te ocurra, experimenta con ello y disfruta del sabor que te ofrecen estos alimentos naturales. No solo estarás completando tu ingesta diaria de proteínas a través de las verduras, sino que también conseguirás muchos nutrientes necesarios sin un aporte calórico excesivo.
¿Ya has pensado qué sandwich vas a comer hoy?