Lo has intentado todo. Todos y cada uno de los ejercicios para definir tus abdominales y conseguir la preciada tableta de chocolate. Pero es que se te está escapando un pequeño, aunque muy importante, detalle: tu alimentación sana.
De poco sirve que te dejes la piel, y el sudor, en el gimnasio, si no sigues unos hábitos de alimentación saludable, con una dieta para perder peso y una dieta para deportistas. Recuerda que tan importante es hacer deporte a diario como comer sano. Verás como tu esfuerzo en los entrenamientos mejora si sigues estos hábitos para lucir una tableta de chocolate perfecta.
1. Haz cinco comidas al día
No es lo más recomendable según expertos lo que la mayoría de la gente hace. Consumir la mayoría de calorías diarias en dos o tres comidas no ayuda a perder más peso. Seguir una dieta baja en calorías para adelgazar sí, pero se puede quemar más grasa si se hacen unas cinco comidas al día.
Una comida nutritiva o un snack sano cada tres horas mantiene el nivel de azúcar en sangre estable, le aporta a tu organismo los nutrientes que necesita y evita que te mueras de hambre y caigas en la gula. También ayuda a mejorar el almacenamiento de glucógeno en el hígado y en los músculos. Así que haz unas cinco comidas ligeras durante el día.
2. Toma la cantidad adecuada de proteínas
Las proteínas son un nutriente esencial que no puede faltar en ninguna dieta para deportistas. Son necesarias para optimizar la pérdida de peso, quemar más grasa y fortalecer los músculos. Por eso, deberías poner en práctica estos consejos para mejorar la ingesta de proteínas. También es necesario que conozcas qué alimentos contienen más proteínas y cuáles son las mejores proteínas.
No pueden faltar en tu dieta alimentos como atún o pavo, legumbres, huevos y productos lácteos. Ni tampoco desayunos ricos en proteínas para empezar el día con energía.
3. Presta atención a los carbohidratos
Al igual que las proteínas, los carbohidratos son otro nutriente esencial muy importante que no puede faltar en la alimentación para deportistas. Aunque los más recomendables son los carbohidratos complejos, porque ralentizan la digestión, evitan que se dispare la insulina y al contener fibra, son muy saciantes, no está de más comer varios tipos de carbohidratos.
Pero cuidado, eso no quiere decir que ahora te dediques a comer dulces y carbohidratos simples todos los días, no. Solo muy esporádicamente. Incorpora ya a tu dieta saludable alimentos como patatas, arroz integral, pasta y verduras que le aporten a tu organismo carbohidratos, aunque hay más alimentos ricos en carbohidratos.
4. Bebe mucho líquido
Tu cuerpo no puede transformar de manera eficiente los carbohidratos en energía sin agua. Hay que beber mucha agua o aportarle al organismo este preciado líquido a través de alimentos como frutas y verduras. Mantente hidratado y no esperes a morirte de sed para beber agua. Bebe con frecuencia durante todo el día, especialmente antes y después de entrenar.
Y si el agua normal te resulta aburrida, puedes preparar agua detox con frutas como el limón, la lima, las fresas o las frambuesas, o incluso con pepino. También puedes prepararte un batido o smoothie cargado de vitaminas y minerales.
5. Empieza y termina bien el día
El desayuno y la comida que hagas después de entrenar deben ser ricas en carbohidratos. Las reservas que tu organismo tiene de glucógeno están bajas cuando te levantas, por lo que hay que reponerlas a través de los alimentos para poder estar activo física y mentalmente. Debes comer carbohidratos simples y complejos, combinados con proteínas, aproximadamente una hora después de entrenar para ayudar a que tus músculos se recuperen y tu organismo vuelva a tener energía.
Por su parte, la última comida que hagas antes de dormir es mejor que sea más rica en proteínas que en carbohidratos. Y si comes carbohidratos, que sea de alimentos con agua y fibra como el pepino, las verduras de hoja verde, los tomates o los espárragos. Además, debes incorporar el pescado de manera habitual en tu dieta saludable, ya que el salmón y el atún aportan ácidos grasos saludables esenciales.