A partir del mes de agosto los aficionados a las setas y hongos estudian con atención las lluvias para saber si la temporada será buena o no. Salir a la montaña a por setas es una interesante actividad que nos permitirá disfrutar del aire libre mientras hacemos ejercicio y, si el día se ha dado bien, de una deliciosa y nutritiva cena a base de setas, uno de los alimentos más saludables que hay.
Todos los beneficios que nos aporta comer setas
El top de setas saludables
Pero para ello hay que saber diferenciar las setas comestibles de las tóxicas -coge solo las que conozcas-, pero también es importante conocer las más saludables:
1 Rebollones
Empezamos hablando de los rebollones o níscalos, una de las setas más sabrosas y saludables que existen. Son las reinas de la montaña, una de las más buscadas, tanto por su sabor como por sus propiedades nutricionales. Ricas en minerales, vitaminas, proteínas o hidratos, tienen un alto contenido en fibra que favorece el tránsito intestinal y la salud digestiva. Aunque las setas son un alimento ligero, son una de las variedades que más calorías aportan. Aun así, su aporte energético es ideal si buscas recuperar algo de peso.
2. Rebozuelo
Otra seta muy buscada es el rebozuelo, conocida como rossinyol en Catalunya o chantarela en otros puntos de la geografía española. Además de ser deliciosas, la peculiar forma de trompeta de estas setas que suelen crecer en zonas de coníferas, castaños, alcornoques o encinas las convierte en un buen elemento decorativo para guisos de carne o pescado. Sin olvidar la importante aportación de hierro o potasio, que convierten a esta seta en uno de los platos imprescindibles para los veganos o deportistas que buscan su energizante y rica proteína vegetal.
3. Champiñones
Unas características similares tienen los champiñones, una de esas setas que encontramos todo el año en el mercado, y que podemos comprar ya troceada en el supermercado. Además de ser muy versátiles en la cocina los champiñones blancos nos aportan hasta 390 miligramos de potasio cada 100 gramos, en los que habrá 4 gramos de proteína y tan solo 35 calorías. Si a este bajo aporte calórico le sumas que un 95% de su composición es agua tenemos a una seta ideal para cualquier dieta adelgazante, que nos permitirá ingerir nutrientes sin problemas.
Otros beneficios que nos aportan los champiñones
4. Boletus
Algo parecido podemos decir de los boletus -ceps, hongos-, otra de las especies de setas más buscadas y que tienen incluso menos calorías que el champiñón: están por debajo de las 30 calorías cada 100 gramos. Son ricos en fibra, y por su contenido en agua nos permiten preparar unos platos copiosos a cambio de muy pocas calorías. Acabamos con los champiñones portobello, de color marrón, que doblan el aporte proteico de otras setas y son ricas en minerales como el potasio, convirtiéndose en una seta ideal para hipertensos.
Cómo comer setas
Puede parecer una tontería, pero la preparación de las setas tiene su misterio. A no ser que las compres ya deshidratadas -tendrás que hidratarlas- hay que limpiarlas, tanto si las has cogido con tus propias manos como si vienen del mercado. Además de cortar la parte de la base en contacto con el suelo hay que lavarlas bajo un chorrito de agua. Si las sumerges en agua la absorberán, y parte de su delicioso sabor y propiedades nutricionales se quedarán por el camino.
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Al limpiarlas comprueba que están en buen estado, en especial si las has cogido en la montaña. La gran mayoría de las setas deben cocinarse antes de comerlas, solo el champiñón -aunque no es muy recomendable- o el boletus se pueden comer crudos. Tanto estas setas como las de cardo, la llanega o mucosa, la de chopo, las trompetas, etc. son ricas en minerales, vitaminas y antioxidantes; un alimento muy saludable que debes consumir con regularidad pero en pequeñas cantidades ya que al estómago le cuesta un poco procesarlas.
Si eres de esas personas a las que le encantan las setas, debes saber que puedes cultivar setas en casa sin apenas esfuerzo y utilizar para cocinar tus platos preferidos.
