Es una de las plantas más antiguas del planeta, y sus semillas son un diminuto bien muy preciado. Las semillas de lino o linaza son conocidas por sus innumerables propiedades beneficiosas para el organismo. El consumo regular de semillas de lino molidas es muy saludable, y ayuda a combatir numerosas enfermedades, especialmente las crónico-degenerativas.
Las semillas de lino pueden comerse enteras si se añaden a yogures, pudins o incluso a la fruta. También pueden añadirse a salsas, sopas o ensaladas. Si se trituran pueden añadirse a panes y bizcochos. Aunque se recomienda comerlas molidas, ya que aportan más beneficios.
Pero además de fortalecer el sistema inmunológico y combatir enfermedades, las semillas de lino ayudan a mantener la piel suave y el cabello sedoso. Y también sirven para adelgazar. Si todavía tienes dudas de por qué deberías incluir en tu dieta saludable o en tu dieta para perder peso las semillas de lino, aquí van unas cuantas razones:
1. Son anticancerígenas
Hasta 27 componentes anticancerígenos tienen estas diminutas semillas. Por ello, ayudan a prevenir y combatir diferentes tipos de cáncer: mama, próstata, pulmón y colon.
2. Reducen el colesterol y enfermedades cardiovasculares
Debido a su alto contenido en ácidos grasos omega 3, 6 y 9 y a la fibra tanto soluble como insoluble que aportan las semillas de lino, ayudan a reducir el colesterol malo.También son buenas para las enfermedades cardiovasculares.
Además, la prostaglandina de estas semillas regula la presión de la sangre y la función arterial.
3. Aportan vitalidad y energía
Consumir habitualmente semillas de lino aporta vitalidad y energía al organismo, por lo que una buena idea es incluirlas en el desayuno. Son un alimento energético porque contienen nutrientes que producen más neurotransmisores y potencian la actividad cerebral.
Y no solo eso, son afrodisíacas y disminuyen el estrés. Tienen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
4. Ayudan a perder peso
Su alto contenido en fibra dietética, tanto soluble como insoluble convierten a las semillas de lino es un alimento para perder peso. Esto quiere decir que personas con problemas de obesidad deberían incluir las semillas de lino es sus platos sanos, porque además, ayudan a eliminar toxinas.
Una buena forma de usar las semillas de lino para adelgazar es hirviendo una cucharada de las semillas con el equivalente a una taza de agua, y cuando el agua quede como espesa o gomosa, cuélala y bebe el líquido antes de desayunar.
La fibra no solo sirve para adelgazar, sino que también ayuda en el proceso de la digestión y combate el estreñimiento.
5. Son buenas para la diabetes
Las semillas de lino regulan el nivel de azúcar en sangre, por lo que son buenas para diabéticos. Y esto se debe a la fibra, ya que se ha demostrado en algunos estudios científicos de la Universidad de Dakota del Sur que ayuda a reducir el azúcar en sangre.
6. Sirven para tener un pelo sedoso y una piel suave
El lino, gracias a su alto contenido en omega 3 contribuye a reducir problemas dermatológicos como la psoriasis o los eczemas. Por su parte, el aceite de lino, es un aliado perfecto para mantener la piel hidratada. Pero el lino o linaza también es bueno para el pelo, porque ayuda a eliminar la caspa.